12.18.2010

e lucevan le stelle (Días extraños)


Silencio.... silencio... silencio... Incluso la luz es estática, no se escucha el respirar de los grillos ni el rechinar de las puertas con tanto vacío. Sentada, en medio de la habitación, miro de un lado a otro buscando respuestas, pero los muros son blancos y mudos, aquí no hay nadie más que el silencio y yo. Mis movimientos son imperceptibles, se desarollan por minutos, incluso por horas, tendrían que sentarse y tomarse su tiempo para ver si es que digo algo. Todo es absurdo, ires y venires de aire, de nada.

Uno no pelea las batallas que quiere, sino las que le tocan. Nadie puede andar por mi, ni acortar mi camino. Quien se queda y quien se va lo decido yo. Cansada, en un estado casi catatónico, me reconozco como un lienzo blanco, con ese blanco tan metido en la piel que me parece increíble tener treinta años de historia a cuestas. ¿Acaso no aprendí nada en todos estos años?, ¿será que la vida es una espiral? Creo que esa es mi naturaleza. No planeo pelear más batallas, me rindo. No cargaré con más cadáveres ni pesos extras. La vida no comienza en otro lado sino en nosotros mismos y aquí todo está en blanco, no he pintado mi alma de ningún color. Las cosas cambian, la cosa cambia, pero la luz no. Reconozco que a veces el ruido más molesto es el silencio, pero la luz siempre es la misma, así que no importa la música ni los sonidos alrededor, hay que escuchar desde dentro.

Ahora a pintarme el alma de nuevo y volver a empezar.


1 comentario:

Anónimo dijo...

Me gusta de que está hecha tu piel ...

Blue ghost (igs)